martes, 6 de abril de 2010

I Pedro 4: preparados para servir a Dios


Cap4:1-5 Preparados para servir a Dios. : El creyente tiene que armarse de una actitud importante para poder vivir para Dios, primero no vivir conforme a sus deseos carnales que por toda la vida habían regido sobre el Rom 8:1,2 1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
, y segundo entender que esta postura radical le traería problemas e inclusivo sufrimientos 2Tim3:1212 Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución;. Nosotros sabemos que Dios en fin de cuenta juzgara a todos, al creyente lo que le tiene que interesar es ser aprobado por Dios y no por los hombres.
Cap4:6-11 Juzgado por los hombres pero vivos para Dios. : Para los hombres personas de tal compromiso están muertos ya que no “disfrutan la vida” como ellos pero para Dios viven y se ocupan de cosas especiales como nombra Pedro.
-Sobrios y velando en oración ante la llegada de su Señor .Mateo 24:4242 Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
1Co16:13 13 Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos.
-Amando fervientemente pues ayuda a sobre llevar las flaquezas de los demas Rom15:1 1 Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.
-Hospedar sin quejas abrir la puertas de tu hogar para servir . Heb 13:22 No os olvidéis de la hospitalidad, porque por ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.(A)

-Usar el don que Dios te ha dado en servicio de los demás Rom 12:6-8 6 De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada,(B) si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe;
7 o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza;
8 el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría.

-Los ministros
-hablen conforme a la palabra y no la suya ICo1:17-26 18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios.
19 Pues está escrito:
Destruiré la sabiduría de los sabios,
Y desecharé el entendimiento de los entendidos.(F)
20 ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo?(G)
21 Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.
22 Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría;
23 pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura;
24 mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios.
25 Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.
26 Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles;

-Y ministre conforme al poder de Dios.1Co 1:4,5 4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder,
5 para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

Estas cosas le dan Gloria a Dios y muestra un pueblo sometida a Dios.
4:12-19 Padeciendo por el maestro: El creyente que padece por Cristo debe alegrase y tener la actitud de los apóstoles hechos 5:40-42 40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad.
41 Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre.
42 Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.
Es importante que sea por eso que sufrimos y no por acciones que merecen castigo de otra manera lo merecemos y no le damos gloria a Dios. El juicio comienza con nosotros y si actuamos como impíos no podemos esperar mejor trato, seamos juzgado siéndole fiel.

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